Cáncer de pancreas

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Hemos desarrollado el siguiente esquema  en que se constituye el cuadro biológico que genera y desarrolla el cáncer de páncreas: Tendencia al estancamiento enzimático  y al estasis sanguíneo en la zona periumbilical e hipocondrios

La agresión primaria sobre una célula del epitelio del conducto pancreático (independientemente de la mayor o menor disponibilidad genética de esa célula para alterar su núcleo), proviene  de un hígado con metabolismo muy activo y consecuente producción biliar y enzimática excesiva que agobia a órganos y tejidos sobre los que su metabolismo actúa.

Nos encontramos frecuentemente con:

  • Insuficiencia vagal y/o hipersimpatismo, y agitación emocional.
  • Páncreas exocrino  de constitución claramente insuficiente. Esta debilidad se hace patente en forma de fáciles pancreatitis subagudas e  hipopancreatismo constitucional. Estas inflamaciones son también expresión del agobio enzimático hepático.
  • Hiperfagia (aumento exagerado del apetito). Gastritis frecuentes. Por la misma razón., hiperfagia que coincide con malas digestiones.
  • Disquinesia biliar o alteración del drenaje a nivel duodeno pancreático o inflamación o espasmo del esfínter de Oddi. Contexto de dispepsia. Todo ello como señalización del ataque hepático.
  • Fáciles hiperglicemias en individuos pletóricos. Puesto que la acción agresiva hepática induce agotamiento de las células beta.
  • Asociaciones frecuentes con prediabetes y hernia hiatal

Se trata, como podemos ver en esta sintomatología de un terreno con un hígado y con sistema simpático pletóricos y tejido pancreático débil, incapaz de soportar la agresión metabólica constante proveniente de aquel. En este esquema el hígado expresa su plenitud y el páncreas expresa su deficiencia:

  • Tendencia a H.T.A. y/o HIPERGLICEMIA y/o HIPERCO-LESTEROLEMIA y/o HIPERURICEMIA. Por la misma razón: La hiperactividad hepática.
  • En mujeres tendencia a celulitis (abdomen, rodillas, muslos).
  • Tendencia a cefaleas digestivas, postprandiales (con sensación de “serrado” en la cabeza). Como expresión de la agitación hepática sobre vesícula biliar y de aquí por el meridiano de V.B. a la cabeza.
  • Tendencia, en mujeres, a síndrome premenstrual con retención, edema y aumento LH.

El terreno en que un ser humano puede constituir una primera inicial célula tumoral es, naturalmente, previo al desarrollo de las alteraciones moleculares en citosol, en membrana celular, en retículo, en mitocondrias o finalmente genéticas en cuyo estudio se ha desarrollado la oncología oficial.

Por tanto, insistimos, este estudio de la biología del terreno alterado tiene como objetivo único el marcaje diagnóstico de la biología que precede a la lesión neoplásica.

Disponemos de fórmulas de plantas chinas que han demostrado su actividad antitumoral en el cáncer de páncreas mediante estudios científicos.

La vitamina C endovenosa también ha demostrado su eficacia como tratamiento complementario en el cáncer de páncreas.

Es muy importante la elaboración de una dieta para el cáncer dirigida a reforzar el sistema digestivo, a eliminar las sustancias tóxicas acumuladas, y con alimentos con acción antitumoral.

El cáncer pancreático consiste en el crecimiento de células cancerosas en el páncreas. El páncreas es un órgano dentro del abdomen, plano, en forma de pera. Produce enzimas digestivas y hormonas, incluyendo a la insulina.    

El cáncer se produce cuando las células del cuerpo se dividen sin control. Si las células siguen dividiéndose en forma descontrolada, se forma una masa de tejido llamada tumor. El término cáncer hace referencia a los tumores malignos. Los tumores malignos pueden invadir a los tejidos cercanos y así diseminarse a otras partes del cuerpo.                                                                                                 

El cáncer de páncreas es uno de los tipos de tumores más difíciles de diagnosticar, debido a que los síntomas suelen aparecer cuando la enfermedad ya está en una fase demasiado avanzada. Además, la localización de esta glándula impide que los tumores más pequeños sean detectados durante las revisiones rutinarias.                                                                                                                                                                 

Cáncer de páncreas exocrino

Las formas más habituales de cáncer de páncreas exocrino son los adenocarcinomas. Constituyen la gran mayoría de los tumores de este órgano (más del 95 %). Afectan a las células encargadas de la elaboración de los jugos digestivos y se localizan más frecuentemente en la zona de la cabeza pancreática.  Son mucho menos frecuentes los tumores del cuerpo y aún más infrecuentes los situados en la cola pancreática.

Son muy raros otros tipos de cáncer como linfomas y sarcomas.

Cáncer de páncreas endocrino

Se consideran aparte los cánceres que afectan a las células en las que tiene lugar la síntesis de sustancias hormonales. Estos son mucho más raros (insulinomas, glucagonomas....) Poseen un curso diferente al resto de tumores pancreáticos, tanto en los síntomas como en el diagnóstico y tratamiento. 

El cáncer de páncreas no es un tumor excesivamente frecuente (el 2,1% de todos los tumores), pero su incidencia ha aumentado constantemente en los últimos 50 años y parece que continúa aumentando en la actualidad.

En España se registran unos 4.000 casos anuales, lo que representa el 2,2% de los tumores masculinos (2.129 casos) y el 2,7% de los femeninos (1.750 casos). Es un tumor ligeramente más frecuente entre los hombres que entre las mujeres.

La incidencia en nuestro país se puede considerar media (tasa ajustada mundial en 2002: 6,6 nuevos casos/100.000 habitantes al año en hombres y 3,9 en mujeres).

La mayoría se diagnostican entre los 65 y los 75 años.

En concreto, las conclusiones destacan la importancia del diagnóstico precoz para conseguir extirpar el tumor, ya que apenas 2 de cada diez pacientes son candidatos a esta intervención en el momento en el que se descubre que padece este tipo de cáncer. En este sentido, los expertos señalaron que únicamente entre el l5 y el 20% de los casos se diagnostica cuando aún es susceptible de cirugía radical, e incluso en estos casos la supervivencia a los cinco años es de entre un 18 y un 24%.

Las causas exactas del cáncer de páncreas aún son desconocidas, pero se han identificado algunos factores que aumentan el riesgo de desarrollarlo:

  • Fumar: El cigarrillo es el principal factor de riesgo. Los fumadores tienen entre 2 y 3 veces más posibilidades de desarrollar este cáncer que los no fumadores.
  • Edad: La edad es otro factor de riesgo, pues este cáncer raras veces aparece antes de los 45 años, y la mayoría de los pacientes tienen entre 65 y 75 años.
  • Diabetes: Entre el 10% y el 20% de los pacientes con este cáncer, tienen diabetes.
  • Antecedentes personales o familiares: Si existen antecedentes familiares de pancreatitis o de cirrosis del hígado, el riesgo es mayor. Así como si en la familia hay historia de cáncer de páncreas.
  • Estilo de vida: Una mala alimentación rica en grasas, la obesidad y la vida sedentaria también aumentan los riesgos.
  • Cirrosis del hígado.
  • Exposición ocupacional a agentes como pesticidas, tintes y sustancias químicas.
  • Problemas estomacales: La bacteria llamada Helicobacter pylori, aumentaría el riesgo.

No hay pautas establecidas para la prevención del cáncer de páncreas. Por ahora, lo mejor es evitar los factores de riesgo para el cáncer de páncreas siempre que sea posible.

El cáncer de páncreas es difícil de detectar con anticipación, dado que no causa síntomas de inmediato.

Cuando éstos se manifiestan, suelen ser imperceptibles y constan de: coloración amarillenta de la piel y los ojos, dolor en el abdomen y la espalda, pérdida de peso y fatiga.

Debido a que el páncreas está casi escondido detrás de otros órganos, los médicos no pueden ver ni palpar los tumores en los exámenes de rutina. Entonces, se detecta demasiado tarde y como se disemina rápidamente, resulta muy difícil de tratar.

Según si la parte afectada son las células exocrinas u endocrinas del páncreas, se forman tipos de tumores totalmente diferentes.

Para la prevención del cáncer de páncreas se debe considerar lo siguiente:

  • Dejar de fumar.
  • Mantener un peso saludable.
  • Seguir un régimen alimenticio y físico.
  • Adoptar una dieta saludable que haga énfasis en los alimentos vegetales. Esto incluye comer al menos una cantidad de frutas y verduras importante todos los días.

Lo ideal es tomar panes, pastas y cereales integrales en lugar de granos refinados. Mejor consumir pescado, aves o frijoles en vez de carnes rojas y procesadas (embutidos, salchichas, etc.) ya que al mismo tiempo que ayudan a reducir el riesgo de cáncer, también lo hacen con otras enfermedades (cardiovasculares por ejemplo).

Cáncer de páncreas en estadio I y estadio II.

El tratamiento del cáncer de páncreas en estadio I y en estadio II puede incluir los siguientes procedimientos:

  • Cirugía con quimioterapia o sin esta.
  • Cirugía con quimioterapia y radioterapia.
  • Participación en ensayo clínico de quimioterapia combinada
  • Participación en un ensayo clínico de quimioterapia y terapia dirigida (erlotinib), con quimiorradiación o sin esta.

Cáncer del páncreas en estadio III.

El tratamiento del cáncer del páncreas en estadio III puede incluir los siguientes procedimientos:

  • Cirugía paliativa o colocación de endoprótesis para derivar   las áreas obstruidas en los conductos del intestino delgado.
  • Quimioterapia (gemcitabina) con terapia dirigida (erlotinib) o sin esta.
  • Quimioterapia combinada.
  • Quimiorradiación seguida de quimioterapia.
  • Quimioterapia seguida de quimiorradiación para un cáncer que no se ha diseminado hacia otras partes del cuerpo.
  • Participación en un ensayo clínico de terapias nuevas contra el cáncer, con quimioterapia o quimiorradiación.
  • Participación en ensayo clínico de radioterapia administrada durante la cirugía o radioterapia interna.

Cáncer del páncreas en estadio IV.

El tratamiento del cáncer del páncreas en el estadio IV puede incluir los siguientes procedimientos:

  • Quimioterapia (gemcitabina), con terapia dirigida (erlotinib) o sin esta.
  • Quimioterapia combinada.
  • Terapias paliativas para el dolor, como bloqueo de nervios y otros cuidados médicos de apoyo.
  • Cirugía paliativa o colocación de endoprótesis para derivar las áreas obstruidas en los conductos o en el intestino delgado.
  • Participación en los ensayos clínicos de sustancias nuevas contra el cáncer, con quimioterapia o sin esta.

Cáncer de páncreas recidivante

El tratamiento del cáncer de páncreas recidivante puede incluir los siguientes procedimientos:

  • Quimioterapia.
  • Cirugía paliativa o colocación de una endoprótesis para  derivar las áreas obstruidas en conductos del intestino delgado.
  • Radioterapia paliativa.
  • Otras medidas médicas paliativas para reducir los síntomas, como el bloqueo de nervios para aliviar el dolor.
  • Participación en ensayos clínicos de quimioterapia, terapias  nuevas contra el cáncer o terapia biológica.